A través de un manifiesto público hacen conocer supuestas ventajas comparativas y competitivas. Por ejemplo destacan que el complejo se ubicaría muy cerca a la vía Costanera Matarani – Quilca – Camaná, pero apenas deslizan que dicha vía aún no esta construida.
Tampoco reconocen que en Arequipa hay una tensión respecto a los proyectos mineros, a diferencia de Moquegua donde ha primado el diálogo entre las mineras y la población.